martes, 22 de octubre de 2013

Valores humanos a partir de la música

      Desde tiempos inmemoriales, la música responde a la necesidad del ser humano de buscar diferentes formas de comunicar sus sentimientos. Se postula que la música surge del uso del lenguaje y de experiencias internas; esto significa que la música es parte integral e inseparable de nuestro complejo sistema nervioso, por lo que el dicho de "llevarla en la sangre" tiene sólidas bases. 

     La música es imprescindible en la vida de las personas, se destaca por su naturaleza artística impregnada de valores de vida.

¿Quién no se ha sentido una persona diferente escuchando su melodía preferida y quién no se ha aislado totalmente del mundo que le rodea mientras se deleita 
con una pieza musical?


     La música es el arte que más cautiva a las personas es algo ya plenamente reconocido, pero que sea igualmente un instrumento para mejorar el comportamiento de los seres humanos, es un tesoro invaluable para vivir, además conlleva valores humanos y sociales: 
Humildad,  Esfuerzo, Excelencia, Dedicación, Compromiso, Respeto, Confianza, Educación, Creatividad, Superación,  Amor y muchos valores importantes.

    Y es que la música es algo más que unos sonidos considerados armónicos; tan grande es la influencia de la música sobre los seres vivos, que se ha utilizado tanto para potenciar la agresividad como la tranquilidad, del mismo modo que se emplea para dormir, relajar, estimular o concentrar. 


    La música contribuye con la interacción y estrechamiento de relaciones con otras formas del arte como la poesía, la épica, el teatro, la pintura... En Venezuela, la mayoría de las formas estróficas que se emplean en el canto proceden de la herencia hispánica.

     A nivel cerebral y neurológico, la música brinda innumerables beneficios a quienes la practican regularmente. Las investigaciones realizadas por Richard Frackowiak del Instituto de Neurología de Londres, han comprobado que la música incrementa las conexiones neuronales y estimula tanto el aprendizaje -actividad prioritaria del hemisferio izquierdo-, como la creatividad, actividad principalmente desarrollada en el hemisferio derecho.

      La música es un excelente medio de transmisión de contenidos de todo tipo. En el ámbito educativo ha de figurar como una herramienta pertinente para incentivar en los jóvenes sentimientos afectivos hacia la cultura nacional, actitudes positivas en favor de la adquisición de valores éticos, morales y espirituales, así como el conocimiento de las tradiciones y folklore de su entorno geográfico. 


miércoles, 2 de octubre de 2013

¿Cuántas horas al día escuchas música?

Muchas personas colocan música para pasar el rato, otras para hacer ambiente, muchas otras para bailar, para relajarse, y algunas otras para concentrase...

Pero pocas se han dedicado a indagar sobre los beneficios que aporta a nuestro organismo escucharla diariamente. ¿Qué efectos produce la música en las personas?

Es una interrogante bastante relevante y que resulta interesante responder.
 
Es necesario saber que desde épocas pasadas ya habían teorías sobre la influencia de la música en los humanos. Filósofos como Pitágoras, Platón y Aristóteles ya creían que la música podía influir a nivel físico y emocional. Además, estaban convencidos de que aumentaba el bienestar social y mejoraba la calidad de vida. Y expresaron citas que hoy son totalmente certeras.
Platón "La música es para el alma, lo que la gimnasia es para el cuerpo”
Aristóteles “La música contribuye al reposo” “La música da placer.. Y la virtud de gozar, amar y odiar rectamente”.
Luego del transcurrir de los años se confirmó lo que antes era solo una teoría, muchos son los estudios que ratifican este poder de la música en las personas. Un estudio reciente arrojó lo siguiente:

“En el Centro de Investigación de la Adicción de Stanford (California), el científico Abraham Goldstein comprobó que la mitad de las personas estudiadas experimentaban euforia mientras escuchaban música. Las sustancias químicas sanadoras generadas por la alegría y riqueza emocional de la música capacitan al cuerpo para producir sus propios anestésicos y mejorar la actividad inmunitaria. Formuló la teoría de que las “emociones musicales”, es decir, la euforia que produce escuchar cierta música era la consecuencia de la liberación de endorfinas por la glándula pituitaria, como respuesta a la actividad eléctrica que se propaga en una región del cerebro conectada con los centros de control de los sistemas límbico y autónomo. 
 Y a través de diferentes estudios se han comprobado los beneficios de escuchar música diariamente y hasta ha surgido la musicoterapia como método efectivo para el bienestar del organismo. A continuación les dejo varios de los beneficios que la música provee a las personas: 

Reduce el dolor. Escuchar música a diario reduce el dolor crónico hasta en un 21%. Cuando escuchamos música liberamos endorfinas, y éstas actúan como analgésicos naturales. Eso no solo hace que las personas se sientan más en control de su dolor, sino que ayuda a aumentar la felicidad y a disminuir la depresión.

Aísla al estrés. Un mínimo del 25% de las enfermedades que sufrimos están asociadas al estrés. Escuchar media hora de música suave aunque sea dos veces por semana, reduce significativamente los niveles de estrés y ansiedad. Las melodías supraneurales con bases de sonidos binaurales son excelentes para cada momento de tu vida.

Refuerza la salud. Escuchar música suave también ayuda a reducir la frecuencia cardíaca y la presión arterial. Por tanto, reduce el riesgo de sufrir problemas de salud. Un estudio realizado en Italia demostró que las personas con la presión arterial alta reducían el ritmo cardíaco si escuchaban buena música durante media hora al día 30 días seguidos. Además, quedó demostrado cómo la música adecuada ayuda a calmar a las células y los tejidos que forman los pulmones.

Estimula el cerebro. La música con ritmos fuertes hace que la concentración permanezca más aguda y los pensamientos más alerta. Escuchar música suave, en cambio, mejora la capacidad de concentrarse durante más tiempo, y promueve un estado de calma y meditación. No solamente provoca bienestar y aumenta la creatividad, sino que el efecto dura aún después que la música haya dejado de sonar.

 
 
Estimula el desarrollo de los bebés. La música es el lenguaje de los recién nacidos. El lenguaje musical ayuda a estimular el oído del niño. Canturrear y hacer escuchar música a los niños, aunque sean muy pequeños, les permite estimular sus ganas de expresarse y de hacerse entender. Según algunos estudiosos, los métodos utilizados por el cerebro de los niños para aprender a hablar, se basan en un examen estadístico del lenguaje y de su ritmo.

Aumenta el rendimiento. ¿Has escuchado música alguna vez mientras haces ejercicio? ¿Tu rendimiento ha aumentado? Estos dos hechos están relacionados entre si. Y es que la música no solamente elimina la sensación de fatiga, cansancio y aburrimiento sino que actúa como un estimulante que aumenta la productividad. Un estudio realizado en 2005 demostró que escuchar música mientras se hace ejercicio aumenta la pérdida de peso y ayuda a ser constante.

Facilita el sueño. Escuchar música de baja frecuencia induce a la relajación, y facilita y mejora el sueño. Esto ayuda a que nos pongamos en un estado saludable: los efectos del estrés y la ansiedad desaparecen.

Aumenta el optimismo. La música también puede ser usada para trasladarnos a un estado de ánimo mucho más positivo. Gracias a la música recordamos momentos felices, pero también aumentamos la autoestima y la confianza en nosotros mismos.

Hace de medicina emocional. Otro de sus múltiples beneficios es que cuenta con la virtud de cambiar el ánimo de una persona rápidamente, y ayuda a tener autocontrol, mejora el poder de seducción y vence la timidez. Todo eso hace que la convierta en el mejor remedio para uno mismo.

Invita a socializar. La música une a personas que comparten una pasión similar. Ayuda a conocer gente nueva, a hacer vida social y a unir grupos.

Buena para meditar. Y si la música es tan buena en todos los aspectos de nuestra vida, ¿cómo no va a serlo para meditar? Las melodías suaves tienen un efecto mágico y relajante sobre los estados de tensión y el estrés del día a día. Ayuda a meditar a muchísima gente que hasta entonces tenía dificultades para hacerlo, y está demostrado que dedicar unos minutos al día a la música de baja frecuencia es una de las mejores técnicas de relajación que existen.
 
¿Qué sientes al escuchar música? ¿Luego de conocer estos beneficios te queda alguna duda de su poder? Ahora es momento de convertirla en tu mejor aliada para vivir en armonía.
 

martes, 1 de octubre de 2013

Etimología de la Música


El origen etimológico proviene de la palabra MUSA, que en idioma griego antiguo aludía un grupo de personajes míticos femeninos, que inspiraban a los artistas. Las musas tenían la misión de entretener a los dioses bajo la dirección de Apolo. Precisamente, Apolo era el jefe de las musas; él las dirigía para que entretuvieran a los dioses en las comidas.
Dado que toda cultura conocida ha tenido alguna forma de manifestación musical, la Historia de la música abarca a todas las sociedades y épocas, y no se limita, como ha venido siendo habitual, a occidente, donde se ha utilizado la expresión historia de la música para referirse a la historia de lo que actualmente se denomina música docta.
La expresión de las emociones y las ideas a través de la música está estrechamente relacionado con todos los demás aspectos de esa misma cultura, como la organización política y económica, el desarrollo técnico, la actitud de los compositores y su relación con los oyentes, las ideas estéticas más generalizadas de cada comunidad, la visión acerca de la función del arte en la sociedad, así como las variantes biográficas de cada autor.
Es su sentido más amplio, la música nace con el ser humano, y ya estaba presente, según algunos estudiosos, mucho antes de la extensión del ser humano por el planeta, hace más de 50.000 años. Es por tanto una manifestación humana universal, una forma de expresar un sentimiento muy interior, trascendiendo y cambiando en cada época.